
Publicado en Scientific American el día 27 de Diciembre de 2011
Texto original en inglés por Gary Stix, link: http://bit.ly/z5c6i7
Traducido por Brun González de Espolea
La película de 1936 “Reefer Madness” (Locura del Porro) desarrolló seguidorxs de culto debido a su representación tan exagerada de los males de la marihuana. Ponerse pachecxs y salir a los shows de media noche donde se presentaba se volvió un ritual para muchxs estudiantes universitarios.
El darse cuenta que la mota no es una ruta directa a un asilo mental, como lo es para el personaje de la película, alimentó la burla de lxs espectadorxs nocturnos. La divergencia entre la percepción y la realidad se ha convertido en un problema para otras drogas recreativas en años recientes.
El mes pasado, cuatro científicos de la Universidad de Columbia publicaron un análisis de estudios previos sobre el uso de metanfetamina que cuestiona algunos de los supuestos efectos dañinos de la droga sobre el funcionamiento cerebral.